El espléndido tejo de Santibáñez de la Fuente fue declarado Monumento Natural en el año 1995, se trata sin duda de uno de los ejemplares más impresionantes de entre los tejos de iglesia asturianos y el pueblo de Santibáñez nunca ha dejado de preocuparse de un modo u otro por su conservación. La plazoleta del tejo fue Escenario de las fiestas del Cristo y San Blas y los bailes se hacían al pie del árbol, al son de pandereta y castañuelas. También se bailaba allí la danza prima, se hacían en las cercanías las hogueras de San Juan y San Antonio y bajo la enorme y frondosa copa se subastaba el ramu y se celebraban los conceyus de vecinos.
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