sábado, 10 de abril de 2010

EL LOBO VESTIDO DE ABUELITA - CARTA DE UNA MAESTRA

¿CELEBRACIÓN DEL DIA FORESTAL MUNDIAL?
O
¿CELEBRACIÓN DEL DÍA DE ENCE?

Llevo muchos años trabajando en la enseñanza. He presenciado cómo en las escuelas las empresas privadas organizaban concursos, repartían gratis productos o propaganda al alumnado. Como se les empezó a poner dificultades desde los centros, comenzaron a realizar publicidad encubierta a través de concursos de dibujo o redacción sobre temas que eran de interés en esos momentos en los centros. Por ejemplo, recuerdo que una marca de cepillos dentales protagonizó una campaña de higiene buco-dental, tema de actualidad en los centros en esos momentos, preocupados por todo lo relacionado con la salud. Con esa disculpa repartieron a los niñ@s cepillos dentales con su marca, pegatinas y folletos de propaganda. Materiales que llegaban a casa a través de los niñ@s. ¡Mejor publicidad no existe!

Si durante un tiempo el tema de interés fue la salud, ahora lo es la salud y el medio ambiente, entre otros.

En la escuela manifesté al inicio del curso que no debiéramos colaborar con empresas privadas, que utilizan el medio escolar para hacer publicidad encubierta de sus productos.

Pues bien, el pasado mes de marzo llegó a la escuela una propuesta de participar en un concurso de dibujo de la empresa papelera ENCE. El tema podía haber sido la importancia del papel, o la importancia de la industria papelera, pero mi sorpresa fue que el contenido del concurso era un tema medioambiental: “Bosque sostenible”. ¿ENCE es empresa sostenible? ¿No contamina el aire que respiramos y olemos? ¿Utiliza responsablemente el agua, tan necesaria en el futuro de nuestro planeta? ¿Sus residuos llegan limpios al mar? ¿Y el eucalipto, ese árbol tan beneficioso en Australia, su medio natural, pero de tan dudoso beneficio en nuestros bosques de Europa?

Que un centro escolar, que debe defender el análisis científico y crítico de la realidad, colabore con los intereses privados, y por lo tanto dudosos, de una empresa, no me parece adecuado.

Pero mi sorpresa cada vez iba en aumento, pues la empresa ENCE protagonizaba la celebración del Día Forestal Mundial. Se hacía dueña de un día que, para mí, tenía que ser llevado por instituciones públicas u organizaciones para las que el interés prioritario sea el medio ambiente.

Lo grave es que los escolares perdían un día de clase para ir a la celebración organizada por una empresa privada y nadie decía nada. Podrían haber ido fuera del horario escolar con sus padres. Pero no; todo el profesorado debíamos interrumpir nuestras clases y participar.

Llegamos a la fiesta y, nada más entrar, a cada niñ@ se le repartió una bolsa con una gorra, una camiseta y un cuaderno con publicidad de ENCE.

Allí estaban los centros de la zona: C. E. P. de Jarrio, C. E. P. de Puerto de Vega, C. Santo Domingo, C. E. P. Ramón de Campoamor…
Mi sorpresa fue acrecentándose cuando a cientos de niñ@s les habló primero, largamente, el representante de ENCE de las bondades de la empresa. Los niñ@s en su intervención jugaban, hablaban alto entre ell@s, miraban para atrás. Después siguió hablando una representante del cuidado de las aguas, los ríos… que también habló de las bondades de la empresa ENCE (parecía una representante de la empresa). Los niñ@s hablaban más alto, jugaban y miraban para atrás, ni miraban al conferenciante. Así nos presentaron a representantes de las concejalías de medio ambiente, de cultura del Ayuntamiento de Navia, así como a representantes de instituciones educativas que habían participado como Jurado para la elección de los mejores dibujos del concurso. Por último habló el Alcalde.

Mis ojos se iban abriendo más y más de sorpresa. Yo no entendía nada: ¿qué hacían los de medio ambiente en esa fiesta? ¿Y las instituciones educativas públicas?

A continuación, los premios: 600, 400, 300 euros para las escuelas. Ahora todos estaban más contentos; hasta los niñ@s atendían.

Por fin llegaron los bocadillos, y una lata de bebida. Cuando acabaron de comer, los niñ@s educados en el aula para reciclar todo en recipientes diferenciados de plásticos, papel, orgánicos y demás residuos, me preguntaban: ¿dónde tiramos el papel? ¿Y la lata? ¿Y la sobra de bocadillo? Yo miraba alrededor, pregunté, pero allí no había nada. Saqué una bolsa de plástico de mi bolso y allí tiramos todo. ¿No era una fiesta de bosque sostenible?

Después los talleres, por fin los niñ@s se divertían: taller de chapas, de globos... Los monitores/as fueron muy agradables con los niñ@s. Mientras los niñ@s jugaban, a los maestr@s nos ofrecieron un maravilloso lunch.

Por último, antes de marchar les regalaron un arbolito a cada niñ@. Yo pensé que sería un roble, un abedul o un castaño y así promocionarían el bosque autóctono. Pero era un pino. Me consolé pensando que igual era un pino autóctono.

Pero la traca final fue lo que más me sorprendió, casi los ojos se me salen de las órbitas. A cada niñ@ se le entregaron dos libros, uno que hablaba todo sobre la empresa ENCE y otro que hablaba del eucalipto: que era bueno para los acuíferos, que respetaba a las demás plantas… Se les olvidaron dos aspectos sostenibles: uno, imprimir los libros en papel reciclado y otro, especificar en el libro que el eucalipto en su medio natural, Australia, será muy beneficioso, pero en Europa no.

Para acabar, decir que a mí ni su dinero ni sus tretas me han convencido. El alumnado vio al lobo del bosque sostenible de ENCE disfrazado de abuelita y se lo creyó, pero yo soy una adulta y le he visto, a pesar del disfraz, sus ojos grandes, sus orejas grandes y sobre todo su boca grande y voraz.

Sí me gustaría aclarar que no tengo nada contra la empresa: el papel es necesario y el empleo también. Pero esto no quiere decir que “todo vale” o que tengamos que aceptar todo. La empresa cambiará a medida que escuche otras voces y vea que hay muchas formas de hacer pasta de papel (¿reciclado?) y de ser sostenible.

Una maestra

1 comentario:

Rocío dijo...

Encuentro vergonzoso que las administraciones públicas consientan tales tropelías. Los beneficios de unos pocos acaban saliéndonos muy caros a todos. La felicito por su lucidez, es lo que más necesitan nuestros niños y jóvenes.